23 abril 2014

voluntarios por el Mundo

recorrimos la recóndita isla de Nusa Penida en moto
El pasado mes de agosto viajé junto a mi hijo Jorge a la isla indonesa de Nusa Penida a través de la ONG Voluntarios por el Mundo. La intención era sumergirnos en otra realidad social durante 4 semanas cooperando de manera voluntaria además de conocer mundo. Intercambié varios emails con la ONG local indonesa Friends of the National Parks (FNPF) para predeterminar el marco de nuestra pequeña aportación a los proyectos en marcha y ofrecieron algunas tareas tan apasionantes como monitorear tortugas, cuidar del huerto o plantar especies autóctonas. Me entusiasmé con el viaje y compartirlo con Jorge, me parecía un sueño. Cuando llegamos a la isla, lo que encontramos fue bien distinto.
El campamento de FNPF carecía de un proyecto específico y estaba poblado de voluntarios descoordinados en régimen de bed&breakfast sin actividad aparente. Tampoco vimos las tortugas, ni las especies de pájaros supuestamente en vías de extinción ni señales de alguna gestión de agricultura sostenible. El abandono del lugar y la falta de respeto por parte de los responsables que conocimos fue lamentable. Una lástima que una isla paraíso como Nusa Penida estuviera además infectada de basura. Entre los mas de 50 voluntarios que estábamos, hubieramos coordinado una  limpieza de residuos por la isla, una necesidad real. En lugar del turismo antropológico y animal obsoleto propio de otros tiempos que nos vendieron. En fin, al tercer día saqué todas las fotos que pude del timo indoneso y notifiqué todos los detalles a la ONG española. Como no se trataba de perder el tiempo ni de regodearse en la frustración, gracias a la sempiterna guía de viajes Lonely Planet, reseteamos el viaje y recorrimos en barco las islas indonesas de Nusa Penida, Nusa Ceningan, Nusa Lembongan, Gili Air y Gili Meno. Un regalo a pesar de la odisea del inicio del viaje.
Marie es una voluntaria francesa que lleva 6 meses en la isla y a pesar del vacío de proyectos en FNPF está construyendo por su cuenta un mapa de Nusa Penida
En Nusa Penida disfrutamos de playas de arena blanca vacías, y aguas poco profundas protegidas por arrecifes. Viven del cultivo de algas y suelen practicarlo las mujeres.
Atardecer en el Indico. Indonesia es el archipielago mas extenso del mundo con mas de 17.000 islas y 300 dialectos distintos.
Jorge y su paracaídas de camino a Dream Beach, la playa mas salvaje de Nusa Lembongan
     En Gili Meno y Gili Air nos movimos en bici y a caballo, no  hay otra opción.
como Robinsones
Jorge vestido con un sarong  en Gili Meno
                                               
                   www.fnpf.org 
                   gili air damai home stay
                   sejukcottages gili air      
                   MaoMenoResortGiliMeno                                               
                                                               
                                                              
                              texto y fotos D.P.B.

15 abril 2014

flor de la pasión

                                                                                              Marilyn Minter(NewYork,1948-)



Cuenta la leyenda que una noche de Cupido dos espíritus libres alcanzaron el estado de gracia besándose sin lengua. 

Su gozo alcanzó el polvo de las estrellas y juntos crearon el paraíso de la biodiversidad. 
Una nueva tierra, profunda y amorosa, regada por los meandros del placer.

Los rumores de las sirenas describen laberintos de diamante de roca que iluminan a destellos el mar.
Y los escasos exploradores del alma investigan los mapas sin brújula anhelando descubrir esta tierra cuyas flores regalan la virtud de la ternura y el misterio.

De noche, el néctar de la flor de la pasión despierta la sensualidad del ser al ritmo de la envolvente danza de la risa.
Tan lejos, tan cerca. 




                                              Yann Arthus-Bertrand(París,1946-)
                                                                           


                                                                                     D.P.B.                                                                                                                                                                                                                                                            

05 abril 2014

miedo infantil

De niña quedé hechizada por la imagen del señor Ebenezer en la vieja portada de un cuento de invierno. 
Enmudecí con su réquiem aterrador. 
El áspero aliento de sus susurros se colaba entre mis sábanas atravesando mis sueños.
Viví encadenada a su espectro sintiendo que llegaría esa misma noche. 
Acostada, en la oscuridad, abría y cerraba los ojos encogiendo mis pies, temiendo la garra de sus uñas. 
Conocí al fantasma del miedo avivando los latidos temblorosos de los niños, atravesando las estaciones del frío, viajando en tren a Rumanía..................................................................
El señor Ebenezer Scrooge en Cuento de Navidad  de Charles Dickens
El miedo nace de la desconexión con nuestra esencia. Nos condiciona, limita, engaña, restringe, confunde, empequeñece y distorsiona de lo real.  Impide experimentar lo que verdaderamente somos limitando el desarrollo de nuestro potencial. Creemos en todos nuestros miedos porque nos identificamos con el ego. Esto es fácil de entender, pero llevarlo a la práctica requiere trabajar la observación, la atención y la meditación con una actitud disciplinada y compasiva. ¿Somos lo suficientemente disciplinados para ser libres? 
Una creencia puede ser reconfortante, pero sólo cuando la experimentas llega a ser liberadora.
Por eso el miedo, más allá de cualquier técnica o terapia que nos pueda ayudar, solo se trasciende a través de un trabajo individual, interior y profundo que comienza con la decisión y el compromiso de vivir cada instante conscientemente, de vivir en el ahora. Esta forma de vida nos hará conectar poco a poco con nuestra verdadera esencia, con el Amor. Y en este camino hay que ser compasivos y pacientes.


Gracias a las actrices Maribel Luis y Pilar Matas por inspirarme a escribir este texto escenificando el terror del miedo con tanto arte en MBIG de la Pensión de las Pulgas.
  
            
                                                                   D.P.B.